sábado, 21 de noviembre de 2009

bellingen - dorrigo


ACTUALIZACIÓN FOTOS: bellingen - dorrigo

Primeramente, me gustaría compartir una noticia que seguro no os dará pena alguna, pero que os aseguro que ya me empieza a debilitar: HAY UNA OLA DE CALOR ASFIXIANTE. HORRIBLE!! Y si a ello le sumas que mi coche, pese a ser blanco, tiene una habilidad especial para "chupar" el calor, y que el A/C sólo está representado en forma de botón que no funciona, y si además le sumas que estoy realizando caminatas de entre 9-10 Km por entre bosques, llanuras... lo dicho.

Hoy me he levantado temprano porque había mercado en Bellingen (dónde por cierto ayer asistí a un cocierto punk-rock de una banda local bastante bueno). Un mercadillo agradable, de esos en que hay de todo, y en el que tranquilamente puedes perder una horilla simplemente mirando cosas. He ido en busca de lo más barato para desayunar, y había una china que por 4 eurillos me ha dado bien de comer. Más tarde me he dado cuenta de que esa proteína, grasa o yo que sé que ingerí de buena mañana, me salvó la vida. Porque después del paseíllo que me he dado por un bosque lluvioso (creedme que hoy de lluvioso no tenía nada...) me he visto deshidratado y desnutrido. Exageradamente. Le he echado valor y ganas, y he cumplido con mi objetivo, pero al subirme de nuevo al coche me veía necesitado de alimento (eso sí... he visto unas cascadas que-te-cagas). Así que he conducido una media hora, mojado de arriba a abajo, en busca de algún garito donde comer. Y, cruzando un río, he visto un tejado que asomaba por un lado del puente... he seguido mis instintos y me he acercado.


Mis instintos para los restaurantes son como mis instintos para las camisas. Camisa que me gusta, camisa que vale 80 euros. Pues eso... el restaurante resultó ser de bastante "calité". Pero era o eso o nada, y después me di cuenta que el día de mi cumpleaños tampoco hice nada en especial, así que comí allí. Pan de ajo (aquí se lleva mucho) y un T-Bone Steak que podría haber alimentado a medio África. Creo que mi estómago ya no está muy acostumbrado a este tipo de comidas, porque le ha costado lo suyo digerir.

Así he llegado hasta Pt Macquire, donde voy a hacer noche y mañana ya pongo rumbo a las Blue Mountains, a tiro de piedra de Sydney. Visitaré las Three Sisters, entre otros.

Comentar que aquí he conocido a Montse (Barcelona), la historia de una mujer de unos 50 años que ha hecho exactamente lo mismo que yo: largarse a Australia... jaja, con un par. Después también se va a Nueva Zelanda 3 meses. Ha dejado a sus hijos de 27 y 21 años en Barcelona. Pero lo cojonundo es que ya se fue antes 8 meses para aprender inglés en Irlanda. jajaja. Hay que saber!!

Gran abrazo!

3 comentarios:

Esme dijo...

Muy chulas las fotos, sí señor! Ya se echaba de menos ese tipo de imágenes por aquí... ;P
Por otro lado, recuerda llevar siempre encima algo, aunque sea unas barritas de esas energéticas y una botellica de agua, que siempre te pueden sacar de un mal momento como el que has pasado. Es algo que no ocupa mucho, y no pesa. Sinó que se lo digan a tu padre! En el "Camino" se aprenden muchas cosas... Y la mala digestión, seguramente habrá sido por "engullir", fruto de esa "desnutrición" tras tu momento selva-cascadas. Aisssssss! Como si te viera...
También te diré que gusta verte tan bien, y que ya tenemos ganas todos de darte un achuchón! Acaba de pasarlo bien y disfrutar de esos mundos. Un besazo!

iria dijo...

he de comentarte que la falta de firmas se debe a que nos tenías muy acostumbrados a tu falta de actualización ultimamente y por ello nos hemos acostumbrado a entrar de vez en cuando y ya no todos los días. pero como veo q ahora te estas poniendo al día, volveremos a cambiar el chip, y firmarte todos los días :)
las fotos son una pasada, me encantan!!
1besazo
iri

pare de la criatura dijo...

Si te lo curras un poco tus adictos se volveran a enganchar. Estas pagando el abandono en que nos dejaste en los ultimos tiempos.
Muy buenas las fotos...
Atiende el consejo de Esme con las barritas energéticas, a mi me salvaron en la subida a O Cebreiro, sin ellas probable que no hubiera llegado.
Cuidate y petons.